viernes, 26 de mayo de 2017

2017 Bilbao Triathlon

Casi sin darme cuenta, ha llegado la primera cita deportiva importante del año: el Half de Bilbao (1,9km de natación, 90km de bici y 21km corriendo). Cómo las otras dos citas del año (Triatlón de Alpe d'Huez y el Llanberis triathlon) le hacen bastante sombra no me había mentalizado mucho para él. Pero durante la semana previa, haciendo el "tápering" (ciclo de entrenamiento pre-competición), he ido dándome cuenta de que aunque lo conozco y es en casa, no deja de ser un half. Además es la primera prueba de fuego del año, porque se supone que estoy entrenando para larga distancia y es aquí dónde mejor voy a medir mis progresos. Según se iba acercando el sábado los nervios iban en aumento, y el viernes al quedar con el resto del equipo para ir a recoger el dorsal, ya éramos todos un manojo de nervios. El sábado quedamos con bastante tiempo para vernos con los que iban a hacer la distancia olímpica (1,5km-40km-10km). Ellos salían una hora antes así que teníamos tiempo para verles y para esperar con calma a nuestra salida. También quedé con Jesús Bengoetxea, que ya tenía ganas de verle.
 La hora de la salida (12:50) es mala para el tema de las comidas, así que a las 10 de la mañana estaba con mi plato de pasta... comiendo? desayunando? pero ese horario está bien para poder evitar madrugones y no andar con prisas.
 
Lo dicho, organizamos nuestros boxes, que pon las zapatillas bien, que si deja el calcetín en la posición perfecta... y fuimos a ver la salida del olímpico, para animarles y de paso pasar los últimos momentos de nervios algo más distraídos. También nos acercamos a ver la salida de la T1 y vimos pasar a Xabier Tijero muy bien colocado en 7ª posición, para terminar haciendo 2º (absoluta máquina el chaval!). Vimos a Iñaki San Pedro y nos extrañó no ver todavía a Íñigo padilla, y quedaba de salir Guillermo Cadiñanos; los tres terminaron muy contentos cumpliendo cada uno sus objetivos. Ya no podíamos esperar más, así que dejamos la bolsa en las consignas y poco a poco nos acercamos a la salida. Hasta las 12:40 no empezamos a entrar en el agua y casi sin darme cuenta, en cuanto estaba aproximándome a la salida, dieron el bocinazo: ya no hay más tiempo para más nervios: a nadar!

La natación me resultó bastante dura: había más corriente de la que me esperaba. Al bajar íbamos a toda leche (corriente a favor) así que, cómo no, subiendo costaba más avanzar. Eso hacía que todos tuviéramos la misma idea: acercarnos lo más posible a la orilla para evitar la corriente. Pero claro, no había sitio para todos. Conclusión: manotazos y patadas por doquier. En un par de ocasiones me separé para evitar nadar amontonado. Aún así no pude evitar algún manotazo que me hizo tener que recolocarme las gafas. Gajes del triatleta medio. De todas formas, sigo con mi plan: nadar tranquilo y confiar en que el tiempo iba a ser bueno, porque este año estoy nadando mejor. La parte de nadar tranquilo, salvo algunos ratos, creo que la conseguí, pero la parte del tiempo no: casi 40 minutos. Me llevé una pequeña decepción, pero en seguida cambié de mentalidad y pensé que había nadado bien, la que no se ha portado bien había sido la ría con su corriente, así que sigo a lo mío. Salí del agua en el puesto 314 de unos 510, que está tirando a mal, pero dentro de lo esperable.

Hago una buena transición. Entrando a los boxes tengo un pequeño despiste con la calle, y me paro un segundo, pero me reubico y voy con decisión hasta mi box buscando esos gritos de ánimo de mi madre y mis hermanos que sientan tan bien. Me quito rápido el traje, me pongo el casco y los calcetines rápido y "casi" bien, y salgo pitando y saludando

 Llegando a la linea de monte oigo a Carlos y a Asier qu eme animan, son muy grandes! También veo a Ibon con algún problema para meter las calas. Me monto sin mucha habilidad pero sin problemas y a lo mío. Esta vez sí me pongo rápido las zapatillas (me he acordado de dejarlas bien abiertas) y en seguida estoy dando chepazos para subir a Begoña. Meto desarrollo pero me permito unos segundos de desfogue, aunque en seguida bajo el ritmo y empiezo a regular. Y voy muy bien. Voy adelantando a gente constantemente, señal de que no he salido del agua todo delante que me gustaría, pero también de que las piernas carburan, siendo conservador con las pulsaciones. Sigo convencido de que la estrategia está siendo buena. En la parte llana noto que hay algo de viento así que trato de ir lo mejor acoplado que puedo, que no es mucho, pero la bisagra no da para más:
 Llegando al cruce del Vivero, me fijo en los corredores que están empezando a subir, y me doy cuenta de que van unos cuantos; en esta parte del recorrido se va y se vuelve un trozo por el mismo sitio, así que ves a corredores que van 5km por delante (eso son 10 minutos a 30 km/h) y lo que me viene a la cabeza es: a por ellos! :-) Al llegar a la rotonda donde se da la vuelta veo que Ibon me sigue de cerca y pienso que lo está haciendo bien. Pensé que probablemente subiendo el Vivero le sacaría más margen y en realidad no fué así. Me ha dicho que lo que le costó más fue la segunda vuelta. Empiza el primer Vivero.  Subo contenido. Empiezo a notar que de caja voy muy bien, y que el límite hoy lo va a poner la fuerza, porque noto las piernas ligeramente pesadas. Intento mantener siempre una cadencia alta y cada vez que me doy cuenta de que voy un poco atrancado subo un par de piñones. Voy muy atento a comer y beber constantemente, aunque no tenga hambre ni sed. 
Confieso que me puse de pie para posar. En realidad la bici, subidas incluidas, la hice sentadito, y luego nos quejamos de que nos cansamos... :-)



 En la zona de la cresta, voy manteniendo las pulsaciones en los tramos más llanos y relajando en las bajadas pronunciadas y noto que me bajan muy rápido en cuanto dejo de pedalear y eso es muy buena señal. Bajando hacia Euskaldunak en la segunda vuelta llego a quedarme en 75 pulsaciones.
Según me estoy acercando al Ayuntamiento para terminar la primera vuelta ya voy viendo que el tiempo que estoy haciendo es bueno. Voy atento pero hasta que no estoy saliendo de la rotonda no oigo a Alazne, y levanto la mano para saludar. También me parece oir a Carlos y Asier. Y a por la segunda vuelta. Sigo a lo mio, y sigo notando que las piernas van más justas que la caja. Me engaño un poco diciendome que corriendo se usan otros músculos y que no va a haber problema. En algún momento noto que no me entra bien una barrita y tomo un gel asegurándome de que tengo agua para que no me fastidie el estómago cómo me pasó el año pasado. El problema es que me quedo sin agua y la segunda subida al vivero la hago seco. Hay sombra pero es una pequeña cagada. Cojo isotónico al coronar y me lo bebobajando.
También empieza a molestarme un poco el pie izquierdo, y me da la impresión de que es porque el calcetín está arrugado. La segunda vuelta es menos concurrida pero también sigo adelantando gente. Sigo bien. Un dato: la primera subida al vivero: 19:19; la segunda: 19:13 (y mismas pulsaciones medias: 151). Cómo un reloj!

De nuevo, llegando al box confirmo que el tiempo está siendo bueno, voy muy animado. Hago unas cuentas rápidas y estoy en tiempo de 5:10. Genial! A correr!!

Entrando al box se me salta una zapatilla de la bici y tengo que darme la vuelta para recogerla. Bueno, unos segundillos no van a ningún lado.
Hago una transición decente otra vez, pero no aprovecho para ponerme bien el calcetín izquierdo. Cojo las gominolas y las pastillas de glucosa (error, no las usé y el blister metálico me hizo una rozadura...) y me largo del box, a por la media maratón. Tengo ganas de correr! 
Empiezo y a diferencia del resto de triatlones de larga distancia que he hecho hasta la fecha no empiezo corriendo como un loco. En cambio, empiezo con las pulsaciones muy bajas, y marcando un muy buen ritmo de 4:30. Nada más salir se me junta Unai Peritz, barakaldés del Santurtzi Triruki y charlamos a ratos. Aprovecho para invitarle a la Barakaldesa, y me dice que ya estuvo, pero que había muy poca participación. A ver si le damos un poco de envidia y vuelve al redil ;-). En seguida se nos junta a rueda Ibon Berriolope y vamos los tres juntos cosa de vuelta y media, lo cual me ayuda mucho, porque me distrae un poco del cansancio.
Noto desde la salida que llevo el pie izquierdo "dormido" y creo que es por las arrugas del calcetín (mejorable). No me duele pero es incómodo, aunque no le doy más importancia. A Unai al principio le noto que se tiene que contener para esperar a mi ritmo. Yo voy vigilando y mantengo un ritmo que me resulte "cómodo", no me dejo llevar. En seguida se le pasa la euforia y se amolda al ritmo de los tres. Comenta que se le va a hacer larga y voy intentando animarle, y de paso a mí, pensando en vuelta a vuelta. Yo de verdad voy animado y me encuentro cómodo. Ahora soy yo el que contiene un poquito el ritmo, pensando en ir reservón, que esto es largo. La verdad es que llevar a alguien al lado que va más justo siempre da ánimos. Terminando la primera vuelta veo a David Pérez, que llega con la bici, y me da la impresión de que va muy relajado. Es su primer half y es lo que tiene que hacer, muy bien! Veo a María, mis hermanos y mi madre y me paro delante de Aimar para chocarle las manos dejando a mis dos improvisados compañeros de fatigas unos metros de ventaja. Mi hermano, mientras me anima, me echa la bronca: no te paresss!!! :-) Pero voy muy cómodo y sé que les puedo volver a coger sin problemas. 


Un rato después Ibon nos avisa que se queda, que tiene calambres. Le animo diciéndole que verá cómo no pierde ritmo, que nos vemos en meta (y así fue! lo hizo muy bien!). Y no mucho después, a falta de vuelta y media, Unai también me dice que se queda a su ritmo. Le animo y decido dejar de reservar y volver a coger mi ritmo. Al coger la segunda pulsera (sobre el km 11) me pasa Sergio Serna y me saluda (aupa baraka!) Le digo que ya sabía que me iba a adelantar pero al pasar veo que él sólo tiene una pulsera: lleva una vuelta (7km) menos! Algo le ha tenido que pasar! Pues sí, luego me enteré de que estaba echo papilla con gastroenteritis... Y haciendo un half. Menudo casta!

Termino la segunda vuelta a buen ritmo (4:36). Me vuelven a animar María mis hermanos y mi madre en el avituallamiento del principio de la tercera vuelta. Esta vez Aimar está preparado y chocamos bien las manos, aunque casi me deja clavado del ímpetu! :-)
Pero a pesar de los ánimos, la tercera vuelta me cuesta bastante. Noto alguna molestia en el costado y tengo que bajar un poco el ritmo, dando la tercera vuelta a 4:52 (la verdad es que pensaba que había ido más despacio). Corriendo he cogido agua en todos los avituallamientos y he tomado un gel, no creo que haya sido problema de alimentación o hidratación, aunque hacía bastante calor, sobre todo en la carrera a pie.
Al coger la última pulsera veo a Jesús Bengoetxea y me pregunta si entro ya. Le contesto que sí y veo que él también va en la tercera vuelta. En ese momento pensé que me iba a coger seguro. Calculé que le sacaba unos 3 minutos de ventaja. Hice unos cálculos y pensé que iba a estar ahí la cosa y que podía ser ser bonito llegar juntos (cómo el año pasado con Alberto!), pero para que no me alcanzase muy pronto tendía que hacerlo lo mejor posible. Así que hice un recuento de daños y marqué el ritmo más alto que consideré que iba a aguantar. Me tocó sufrir los últimos km y se me hicieron largos, pero ya sabía a lo que venía; al menos creo que conseguí mantener el tipo y llegar  digno. Al final Jesús no venía tan rápido cómo yo pensaba y mantuvimos la distancia.

 En la recta de meta me alcanzó Daniel Soriano y me dice que no me va a adelantar en los últimos metros, que me lo puedo tomar con calma: que grande!! Eso me permite saludar en la foto de Asier y agradecerle el gesto:






Entré en meta con un tiempo oficial de 5:16:12 (no me cuadra porque el reloj lo paré después de haber entrado en meta en 5:15:22, pero me da bastante igual...), lo que son unos 15 minutos menos que el año pasado, con una sensación muy buena, aunque con la lengua fuera (literalmente):


















Mi valoración es que lo he hecho todo muy bien. Igual podía haberme exigido un poquito más en la bici y haber intentado un ritmo más constante corriendo, pero me doy un 9. La sensación es muy buena, creo que estoy llevando bien los entrenamientos y se nota en la buena evolución. Creo que lo estoy haciendo bien, de momento, para llegar en condiciones de terminarl el triatlón de Alpe d'Huez del 27 de Julio. Ya veremos!